La Fórmula 1 dio a los equipos dos opciones para volver a la acción, tras la pausa obligatoria por el COVID 19: la primera era practicar con vehículos anteriores, mínimo 2018, sin un número de vueltas ni tiempo; y la segunda realizar un “filming day” con su auto actual, pero solo a 100 km/h y con neumáticos de exhibición.
Esta segunda opción fue la que eligió Red Bull, que puso a prueba en Silverstone su RB16 de la temporada 2020, con Alex Albon como el piloto elegido. En estas prácticas, no estuvo presente Max Verstappen, por las restricciones de movilidad que todavía rigen en algunos países de Europa.
En Gran Bretaña se aplica el protocolo de seguridad, que obliga a las personas que lleguen al país a pasar 14 días de cuarentena. Todavía no se aplican las excepciones para los deportistas de alto nivel, que les permite saltarse la cuarentena.
Se esperaba que el equipo practique el Red Bull Ring, circuito de su propiedad y que acogerá el Gran Premio de Austria el próximo 5 de julio, pero eso no ocurrió. El motivo fue que Silverstone se encuentra muy cerca de Milton Keynes, lugar en donde se construyen los vehículos de Red Bull, pero que llevan la bandera austriaca.
Para la escudería habría sido beneficioso utilizar ese trazado, pues serán los anfitriones en la primera carrera de la temporada, y buscan repetir el triunfo de 2019.
Otros equipos como Mercedes, McLaren y Racing Point también practicaron en el trazado británico. Mientras que Ferrari volvió a la acción en Mugello, y Alpha Tauri y Toro Rosso lo hicieron en Imola.
Red Bull fue el último equipo en practicar, a menos de 2 semanas para que inicie la temporada.
