La edición 2020 de la mítica carrera de resistencia fue totalmente diferente a lo que se esperaba: se organizó en una fecha diferente a la acostumbrada y sin público en las gradas, además por la falta de incidentes, lluvia, y de lucha por la victoria.
El triunfo se lo llevó Toyota por tercer año consecutivo, en un fin de semana para el recuerdo para la firma japonesa, tras conseguir el Rally de Turquía. El Toyota #8, el mismo que ganó los dos últimos años, se subió a lo más alto del podio con los pilotos Brendon Hartley, Kazuki Nakajima y Sébastien Buemi a los mandos del LMP1 híbrido.
El Toyora TS050 Hybrid dejará el paso al nuevo Hypercar de la marca a partir de 2021, tras mostrar su gran desempeño y fiabilidad durante 3 años consecutivos. El Toyota #8 salió desde el segundo lugar en Le Mans 2020, tras una pole position considerada como “casi un récord” del prototipo #7.
Lo más esperado de la jornada fue una batalla entre los dos vehículos japoneses, pero un pinchazo del #8 le puso un paso por detrás de su compañero. Sin embargo, en Le Mans todo puede cambiar de un momento a otro. El vehículo líder sufrió un problema en el turbo, lo que le hizo perder las posibilidades de victoria y varias vueltas con respecto al Toyota #8 y a los Rebellion Racing.
La firma nipona no se conformó con la victoria, ya que a pesar de los problemas, el vehículo #7, que llegó a quedarse fuera del podio, en la última hora de carrera logró superar al Rebellion 3 y hacerse con el tercer puesto.
Los Rebellion se mostraban como los únicos que podrían competir contra los Toyota, pero el rendimiento de los japoneses fue superior. Además de ello, la falta de accidentes y vehículos de seguridad fue un factor determinante en la carrera. Fue una edición con menos banderas amarillas e interrupciones de lo habitual. La lluvia tampoco se hizo presente.
La mayoría de incidentes llegaron en la última hora de carrera, cuando prácticamente todo estaba definido. Accidentes del Porsche 99 y del Oreca 39 de LMP2, provocaron la salida del coche de seguridad.
Después de 24 horas de competencia y completar 387 vueltas, el Toyota #8, en ese momento pilotado por Nakajima, se llevó la victoria con 6 vueltas de ventaja sobre el Rebellion #1, con Norman Nato al volante, y siete sobre el Toyota #7, con López al mando.
La próxima carrera del WEC será las 8 Horas de Baréin, el próximo 21 de noviembre.