Terminó 34.7 segundos por delante de Esapekka Lappi, líder durante mucha parte del rallye, consiguiendo su primera victoria desde marzo y subiendo al segundo puesto de la clasificación. El líder de la serie, Ott Tänak, se sitúa a 17 puntos, con un máximo de 90 todavía en juego en las tres últimas pruebas para acabar el campeonato.
Ogier dejó claro antes del comienzo que tan solo la victoria mantendría vivas sus esperanzas de cara al título. Mientras que Tänak y su otro rival en el campeonato, Thierry Neuville, se quedaron por el camino en medio de un intenso calor en las pistas de montaña cubiertas de piedras, Ogier y Citroën fueron maestros.
Lappi tomó la delantera en el tercer tramo del viernes de los 17 de que constó la prueba y se mantuvo en cabeza, y con Ogier situándose en la segunda posición. El francés se situó en cabeza a última hora del sábado, cuando Lappi caló el motor de su C3 en una paella y se relajó en la parte final del domingo, para que el francés logara su tercera victoria del año.
«Esta victoria era realmente necesaria y nuestra única oportunidad de volver a la lucha por el campeonato», dijo Ogier. «Sabíamos que podía pasar cualquier cosa, porque es un rallye muy duro, pero la mala suerte que tuvimos en la prueba anterior en Alemania quedó atrás».
Tänak abandonó con su Toyota Yaris el sábado con un problema eléctrico, pero regresó el domingo para pelear por el máximo de puntos de bonificación en el Wolf Power Stage jugándose aquí el todo o nada. Neuville finalizó muy retrasado en octavo lugar después de su accidente el sábado.
Lappi sobrevivió a un medio vuelco y a un pinchazo en las dos últimas especiales para acabar en segundo lugar contento después de una mala temporada. El finlandés terminó 29,8 segundos por delante de Andreas Mikkelsen, que sumó unos puntos vitales para ampliar la ventaja de Hyundai Motorsport en la clasificación de constructores que lidera por 19 puntos.
Teemu Suninen no pudo luchar contra Mikkelsen por el podio final del domingo, pero el cuarto puesto con su Ford Fiesta fue un buen resultado para el finlandés después de una exhibición mediocre en la cita anterior de tierra de su país natal.
Dani Sordo fue quinto con otro Hyundai i20, por delante del dúo de Toyota Jari-Matti Latvala y Kris Meeke. Latvala, líder inicial, perdió tiempo al principio del rallye con un pinchazo, mientras que Meeke también retrocedió por problemas con los neumáticos durante el tramo inaugural del viernes.
Detrás de Neuville, Pontus Tidemand pilotó su Fiesta hasta la novena posición y Kajetan Kajetanowicz condujo con un árbol de transmisión delantero roto durante los dos últimos tramos para terminar décimo y ganar la categoría de apoyo del WRC 2.
El campeonato continúa en el Rallye de Gales GB (3 – 6 de octubre). La undécima prueba de la serie, de 14 asaltos, tendrá lugar en Llandudno.
Fuente: www.wrc.com