Durante 150 años Continental se ha dedicado al desarrollo de neumáticos y ha brindado soluciones innovadoras para garantizar una movilidad más segura, comodidad de conducción y mejor rentabilidad.
A principios del siglo XX, todos los neumáticos para bicicletas y automóviles se fabricaban a mano en la planta de Vahrenwalder Strasse, Alemania. Actualmente, los neumáticos Continental se producen en 16 países, en plantas industriales con tecnología de punta para garantizar un producto final con garantía certificada.
En 1905, Continental presentó en el Salón Internacional del Automóvil en Berlín una variedad de soluciones para desarrollar y mejorar los automóviles. La banda de rodadura, introducida por primera vez, aumentó considerablemente la seguridad en la conducción, mientras que las llantas desmontables redujeron significativamente el riesgo de averías.
Las malas condiciones de las carreteras dejaron de ser un problema para los vehículos y sus ocupantes gracias a los “neumáticos globo” que se presentaron en 1924 y gracias a los neumáticos gigantes, se pudieron transportar volúmenes cada vez mayores de mercancías. Los neumáticos zepelín exhibidos en 1936 son un claro ejemplo de cómo se desarrollaron soluciones de movilidad para más áreas de aplicación. Junto a los neumáticos, los productos técnicos de caucho también jugaron un papel importante.
La producción ahora se realiza exclusivamente mediante procesos (semiautomatizados). Los neumáticos más pequeños y más grandes de la cartera se fabrican de esta manera. Con un diámetro total de solo 105 mm, el neumático MH 20 para carretillas elevadoras es el neumático más pequeño de la gama general. Por el contrario, el neumático más grande, denominado Continental DumperMaster, tiene un diámetro total de 206 cm y se utiliza todos los días en cargadores y vehículos de minería.
La historia así lo demuestra, Continental continúa girando sus neumáticos y ratifica su compromiso por innovar y entregar productos de la más alta calidad a sus consumidores.