El Sauber C36-Ferrari es el primer coche presentado oficialmente para la temporada 2017 de Fórmula 1. Anteriormente, con Manor y Williams, ya habíamos podido ver a grandes rasgos cómo serían los nuevos monoplazas, pero ahora estamos en disposición de realizar el ansiado primer análisis del año.
De 2017 ya sabíamos que los coches iban a ser más anchos, con una aerodinámica más espectacular, más rápidos en curva y menos rápidos en cuanto a velocidad punta en recta. Permítanme decirles que el Sauber es un coche muy trabajado y que seguramente veremos en la zona de puntos en más de una ocasión.
Durante el 2016 ya depositaron gran parte de sus esfuerzos económicos en el desarrollo de este nuevo bólido. Además de dichos esfuerzos, el 9º puesto de Felipe Nasr en Brasil fue sinónimo de una inyección de 30 millones de euros en las arcas del equipo de Hinwill, algo que no ha trabado el trabajo sobre el nuevo C36-Ferrari.
Para comprender de una manera más sencilla la aerodinámica del coche, vamos a dividirlo por así decirlo en la parte delantera, central y trasera. Y ahora sí, sin mayor preámbulo, analicemos al detalle el nuevo Fórmula 1 de Sauber.
El equipo de Hinwill aterrizó en Barcelona el pasado fin de semana para preparar los días previos a los test de pretemporada. Parece que Sauber ha tenido la oportunidad de probar su nuevo coche de 2017, pues el propio equipo ha publicado un vídeo de Marcus Ericsson pilotando el que será su monoplaza durante la próxima campaña. Éstas han sido sus declaraciones tras estrenar el C36 en el Circuit de Barcelona-Catalunya.
«Inicialmente se siente bien. Es obvio que la normativa de este año son muy emocionantes para todo el mundo, el sentimiento inicial del coche se ve muy brutal con los neumáticos y las dimensiones más anchas en general. La primera impresión ha sido buena», explica el sueco.
«Es muy difícil ponerse objetivos a estas alturas, porque no sabes donde estás respecto al resto de competidores hasta la primera carrera. Pero como equipo quieres estar otra vez en la mitad de la tabla y luchar ahí por puntos. Es la primera vez de estar con continuidad en la mitad de la parrilla y luchar todos los fines de semana en los puntos. A eso es a lo que tenemos que volver», agrega Ericsson.
Por otra parte, su compañero de equipo, Pascal Wehrlein, no ha podido probar el coche por su lesión en la espalda y en el cuello: «Estoy muy feliz de estar con Sauber este año. Nuevo equipo, nuevo reto, nueva normativa. Puede ser un gran año y espero que podamos tener grandes resultados juntos», declara Wehrlein.
Fuente: www.thebestf1.com