El SEMA Show de Las Vegas es un evento que tendrá lugar entre los días cinco y ocho de noviembre. Es una de las ferias del motor que más repercusión tienen en Estados Unidos. Esta atención se alarga al resto del mundo debido a que no se trata de un Salón del Automóvil como los demás, en el que son solamente los fabricantes oficiales muestran su producto. Muchos preparadores externos tienen el SEMA Show apuntado en rojo en sus calendarios y aprovechan el evento para mostrar sus creaciones más estrafalarias.
En esta feria del motor, además de las gamas de producto de los fabricantes instaurados en Estados Unidos, se puede ver prácticamente de todo. La laxa legislación del país hace que casi cualquier cosa con motor, ruedas y matrícula pueda circular por las calles. Esto se traduce en un gran favor para las empresas preparadoras de vehículos, ya que pueden dar rienda suelta a su imaginación sin ningún tipo de problema. Y es así como lo hacen. En el SEMA Show se pueden ver preparaciones extremas y coches inimaginables.
Al ser un evento en Estados Unidos, sus marcas locales tienen especial presencia. Son coches familiares para la gente y por lo tanto, muchos preparadores los toman como base para sus creaciones. Hay dos segmentos que destacan por encima de los demás. Por un lado están los Muscle-Car americanos, coches como por ejemplo el Ford Mustang. Este tipo de vehículos es bastante elegido por las empresas y suelen hacer modificaciones tanto a unidades del mercado actual como del mercado de los coches históricos. El otro segmento que se suele preparar es el de los pick-up. Se hacen modificaciones de los enormes pick-up que tan buena acogida tienen en el mercado automovilístico estadounidense.
La familia de pick-up de gran tamaño de Ford es bastante elegida para ser modificada. Bien se hacen cambios a los Ford F-150, Ford F-450 etc. Para ser conscientes de las dimensiones que se manejan, hay que recordar que el Ford Ranger, allí es el pequeño de la familia. Con coches de tal envergadura y un folio en blanco para crear tantos cambios como se deseen las unidades finales que salen lucen de una manera espectacular.
Si no impone, no existe
Una máxima que está presente en cualquier preparación que se precie en el SEMA Show es la siguiente: «Si no impone, no existe». En el evento se da una concentración de coches modificados, y ser poco llamativo puede significar una derrota. Las empresas que hacen este tipo de preparaciones bien lo saben y año tras año presentan propuestas extremas.
Un ejemplo perfecto de este tipo de planteamientos, son los que se ejecutan para el uso off-road. Todos siguen una misma fórmula: Neumáticos de tacos de grandes dimensiones, suspensiones sobre elevadas y protecciones frontales cromadas. Algunos a esto le suman tiendas de campaña en la caja o en el techo y potentes sistemas de iluminación auxiliares.
Fuente: www.autobild.es