Toyota registró por tercer año consecutivo como líder mundial en ventas. Y no solo eso: también fue reconocida como la marca de autos más valiosa y de mejor calidad percibida por los clientes.
El presidente de la marca japonesa impuso su filosofía: “No hablemos de ventas, hablemos de cómo ofrecer un producto y un servicio para mejorar la vida de los clientes”.
En una reciente entrevista le preguntaron, ¿Cuál es la clave para ser líder mundial en ventas por tres años seguidos?
El presidente de la marca mundial desde enero 2009 dijo: “No quiero seguir hablando de ventas. Lo que queremos es hablar de cómo ofrecer un producto y un servicio para mejorar la vida de los clientes. De esa manera es como queremos contribuir con mejorar la calidad de vida de nuestros clientes”.
En 2014, Toyota fue el líder mundial con 10,23 millones de vehículos vendidos en todo el mundo. Las ventas globales del grupo incluyen a Lexus, Hino y Daihatsu, además aumentaron en un 3% con respecto a 2013.
Según la marca, es la primera vez que Toyota supera la cifra de 10 millones de unidades. En Japón, el grupo comercializó un total de 2,32 millones de vehículos (1% más que el 2013), mientras que en el resto del mundo colocó 7,91 millones de unidades.
Además, este año volvió a ser reconocida como la empresa automotriz más valiosa (lo ha sido durante cinco años seguidos) y la marca con la mejor percepción de calidad por parte de sus clientes, ambos títulos determinados según estudios realizados por consultoras mundiales como BrandZ e Interbrand.
Toyota desarrolló una frase que se ha vuelto casi una mantra para la organización, que es el “waku doki”; es decir, tratar de introducir la emoción y pasión en lo que hacen, sobre todo en los productos y que sean cada vez más emocionantes.
Una estrategia en la que el cliente es lo primero y la meta es superar siempre sus expectativas. “Las ventas crecerán como consecuencia de ser fiel a este principio”, concluye el comunicado.