Tres etapas son las que le quedan al Dakar. Después de haber superado más de 6 000 km, se encuentran con la parte más dura de la competencia: la etapa maratón. Comprende dos estapas ida y vuelta en Haradh, haciendo noche en la deshabitada Shubaytah, con 1 352 km entre medias y sin asistencia.
Eso último es la clave del reto al que se enfrentan. Porque las especiales son largas, sobre todo la de hoy con 534 km, la segunda más larga (la de mañana será de 379) de todo el rally, pero lo verdaderamente desafiante será no contar con la ayuda de sus mecánicos entre ambas etapas. Solo se podrán ayudar entre ellos. Es más, no puede haber nadie relacionado con los pilotos, e incluso también el sitio, y las condiciones, para la prensa son muy limitados.
Así, tendrán que cuidar especialmente la mecánica, por eso y porque se enfrentan a la cadena de dunas más compleja y larga en el territorio más inhóspito de Arabia, el conocido como el ‘Cuarto Vacío’. El mayor obstáculo de todos al poco de llegar a meta, dispuesto a romper sueños…