Philippe Croizon sufrió un accidente cuando tenía 26, pero tras diez años de recuperación pudo dedicar su vida al deporte. En 2010 cruzó a nado el Canal de la Mancha.
A los 26, Philippe Croizon sufrió una descarga eléctrica de 20 mil voltios mientras arreglaba una antena de TV y a causa de las quemaduras debieron amputarle sus extremidades. Pero tras diez años de recuperación, enfocó su vida hacia el deporte y ahora, a los 47, correrá el Dakar en un buggy adaptado.
No será su primera hazaña: en 2010, Croizon cruzó a nado el Canal de la Mancha. Pero a pesar de su coraje, el proyecto del Dakar estuvo por fracasar.
El francés ya había disputado el Rally de Marruecos para ganar experiencia, pero eso puso en riesgo su participación en el Dakar.
Luego conoció al príncipe catarí Nasser Al-Attiyah, quien se interesó por el proyecto y al enterarse de las dificultades económicas del piloto colaboró con una gran cantidad de dinero, al menos 100.000 Euros.
El prototipo de buggy con el que Croizon correrá tiene con un joystick que le permite acelerar y frenar, también girar a la derecha y a la izquierda. Con el muñón derecho maneja ese comando, mientras que con el izquierdo puede poner la marcha atrás y prender las luces. El resto de funciones las activa el copiloto.
Fuente: www.minutouno.com