Orgu Ford inauguró oficialmente su primer concesionario en Quito la noche del 5 de septiembre de 2024. Este edificio, completamente remodelado, se encuentra en el sector comercial de La Y, al norte de la capital ecuatoriana.
Rodrigo Sevilla, el gerente general de Orgu Ford, destacó que la apertura del concesionario implicó una inversión de 2.5 millones de dólares, lo que refleja el compromiso de la empresa con el desarrollo económico de nuestro país. Esta expansión no solo fortalece la red de concesionarios de Orgu Ford, sino que también dinamiza el mercado local al crear 100 nuevos empleos, tanto directos como indirectos, contribuyendo así al bienestar de la comunidad quiteña.
Trayectoria y respaldo
Con 46 años de trayectoria y liderazgo en la Costa, Orgu Ford ha forjado una reputación tanto en la venta como en el servicio posventa de vehículos. Este éxito no es casualidad; es el resultado de un enfoque constante en la calidad y la innovación, respaldado por Corporación Maresa, un holding automotriz con casi cinco décadas de experiencia representando a marcas internacionales.
En sus palabras, Rodrigo Sevilla manifestó: “La inauguración de este concesionario en Quito no solo marca nuestra entrada al mercado de Pichincha, sino que también reafirma nuestro compromiso con la calidad y el servicio excepcional que nuestros clientes merecen”.
Presencia estratégica
Orgu Ford cuenta con una sólida presencia en Ecuador, con dos concesionarios y talleres en Guayas, dos en Manabí, uno en El Oro y dos en Quito. Además, muy pronto abrirá un nuevo concesionario en Tumbaco.
El evento de inauguración reunió a personalidades destacadas del sector financiero y automotriz, así como a invitados especiales como Lawrence Petroni, jefe de la misión adjunta de la embajada de los Estados Unidos, y José Llano, responsable de Ford en Colombia, Ecuador y Venezuela.
Durante la ceremonia, Alejandro Orrantia, presidente ejecutivo de Orgu Ford y nieto de uno de los fundadores de la empresa, compartió un emotivo relato sobre la historia de Orgu. Agradeció sinceramente a los pioneros que hicieron posible el crecimiento de una de las empresas más emblemáticas de la industria automotriz ecuatoriana.
“La familia Orrantia comenzó su viaje con Ford a finales de los años 30, impulsados por una visión compartida y una conexión estratégica que transformaría el mercado automotriz en Ecuador. Emilio Estrada Icaza, con el apoyo de sus contactos influyentes, y mi abuelo, Luis Orlando González, fundaron Dasa S.A. para traer Ford a Guayaquil”, recordó Orrantia.