En una pretemporada en la que aparentemente nadie está teniendo problemas, ayer le tocó a Red Bull Racing realizar el primer cambio de motor de la temporada. Pese a que no se han confirmado problemas graves, el equipo de las bebidas energéticas reconoció haber tenido que cambiar su unidad de potencia por precaución.
Con Alex Albon al volante, el nuevo RB16 pareció resentirse en su parte trasera hacia el final de las primeras cuatro horas del segundo día de test en el Circuit de Barcelona – Catalunya. Esto provocó que el tailandés no saliese a pista durante los últimos minutos antes del parón y tras los primeros instantes de la reanudación.
Una vez finalizada la segunda jornada de test, Guillaume Rocquelin, el jefe de ingeniería de carrera de Red Bull, reconoció que se debió a un cambio en la unidad de potencia durante el parón a razón de unos pequeños problemas que notaron en los datos y que simplemente era una medida «precautoria».
Así lo explicó Rocquelin más detalladamente: «Tuvimos un pequeño problema justo antes del almuerzo cuando los muchachos de Honda notaron algo extraño en los datos y, por lo tanto, elegimos realizar un cambio de motor con precaución».
Según Red Bull, tras desmontar el motor e investigar la causa de esos pequeños problemas, los ingenieros de Honda no encontraron nada raro o preocupante: «Hicieron una revisión exhaustiva y no hay ningún problema, por lo que la unidad de potencia original volverá a ser montada en el monoplaza».
Pese a todo, Red Bull Racing acabó muy feliz después de las 134 vueltas de Alex Albon en el segundo día de pruebas en esta pretemporada 2020: «Tuvimos otro día muy productivo para el nuevo RB16 y, aunque no completamos tantas vueltas como el miércoles, una vez más superamos todos los elementos que teníamos en nuestro programa».