Luego de una semana del cierre definitivo de la planta de ensamblaje de autos GM-OBB Ecuador (viernes 6 de septiembre), todavía resuena en el ambiente una profunda nostalgia y una mezcla de ansiedad e incertidumbre entre los más de 300 empleados que se reunieron al final de la tarde para rendir homenaje a una de las manufacturas más icónicas de la industria automotriz nacional.
No faltaron lágrimas, abrazos prolongados y gestos de inquietud, pero también se respiraban momentos de esperanza y gratitud hacia la compañía que los acompañó hasta el último instante de la jornada oficial.
Todos estuvieron reunidos alrededor de la última camioneta D-Max ensamblada por manos ecuatorianas: empleados y ejecutivos de Chevrolet, unidos en un instante cargado de emotividad.
La ensambladora, con más de 49 años de historia en Ecuador, cerró sus puertas por decisión de sus altos ejecutivos, quienes buscan enfocarse en nuevas líneas de negocio en un mundo empresarial en constante evolución. Chevrolet en Ecuador se renovó con su nuevo esquema de comercialización.
En esos últimos instantes dentro de las instalaciones de GM-OBB, varios empleados, que habían concluido su jornada horas antes del cierre final, decidieron quedarse para acompañar a sus compañeros en este adiós, compartiendo juntos el sentimiento de «Adiós a GM-OBB, gracias por tanto».
Otros, en cambio, se esmeraron en dejar todo limpio y ordenado en sus puestos, como si estuvieran preparados para regresar al trabajo al día siguiente, como lo habían hecho durante años.
La compañía organizó una ceremonia íntima para despedir a sus colaboradores, brindando gestos de agradecimiento y admiración. Se tomaron fotografías y grabaron videos junto a la última D-Max, la número 8.200 de este año.
Durante sus 49 años de existencia, la empresa no solo se destacó en el desarrollo de la industria automotriz nacional, sino que también se convirtió en una escuela para destacados ejecutivos, muchos de los cuales ahora laboran en otras marcas, llevando consigo un valioso conocimiento adquirido en GM-OBB.
Muchos ejecutivos de ventas y mercadeo han salido del país para trabajar en grandes empresas internacionales alrededor del mundo.
GM-OBB fue una parte fundamental de la vida nacional, contribuyendo al desarrollo de nuevas tecnologías automotrices.
En la actualidad, quedan en el país dos ensambladoras de prestigio: Aymesa (Quito) y Ciauto (Ambato). Esperamos que estas dos compañías logren alcanzar sus objetivos y sigan contribuyendo de manera significativa al crecimiento de la industria automotriz ecuatoriana.