La industria del automóvil, y por extensión el mundo de la competición, avanza hacia la sostenibilidad ecológica, y el Dakar no piensa quedarse atrás. El rally más duro del mundo ya tiene un plan por el cuál esperan reducir drásticamente sus emisiones en la próxima década, comenzando ya por la edición de 2022.
El Dakar ha presentado una hoja de ruta con tres fases. La primera comenzará la próxima temporada e incluirá la creación de una categoría de energías renovables para coches y camiones. La segunda será en 2026, cuando todos los pilotos Élite deberán llevar un vehículo de bajas emisiones, y la última en 2030, cuando el hidrógeno entrará en el Dakar.
En 2022 se creará una categoría de energías renovables en la que estará Audi
Esta hoja de ruta solo afectará a coches y camiones, dejando al margen de momento a las motos y los quads. El objetivo de la Amaury Sport Organisation, la ASO, asociación organizadora del Dakar, es que para 2030 todos los coches y camiones del rally sean de muy bajas emisiones, según explicó David Castera, el director del Dakar.
El primer paso se dará ya en 2022, la próxima edición, en la que habrá una categoría de energías alternativas para coches y camiones. Será ahí donde esté involucrada Audi con la nueva estructura Q Motorsport, que hace unas semanas anunció su entrada en el Dakar de 2022 con un todoterreno eléctrico.
Al parecer, ASO se ha comprometido a adaptar los reglamentos deportivos para que proyectos de energías renovables, como el de Audi, puedan ser competitivos. La marca alemana no quiere verse apabullada por Toyota y MINI, los grandes dominadores del Dakar. 2022 solo es la primera estación del tren de la sostenibilidad.
La segunda fase va a comenzar en 2026, cuando tanto los coches como los camiones considerados Élite deberán participar con vehículos de muy bajas emisiones. Es decir, la organización del Dakar otorgará categorías a los equipos en función de sus probabilidades de éxito y recursos económicos y les obligará a pasar por el nuevo reglamento de bajas emisiones.
Todo esto para terminar en 2030 con el destino final de este plan, la entrada del hidrógeno en el Dakar. Será obligatorio que todos los participantes cumplan con estas exigencias de mínimas emisiones y Castera confirma que ya están trabajando junto al gobierno de Arabia Saudí en poder tener todo preparado para hacer el Dakar exclusivo del hidrógeno para esa fecha.
Además del proyecto eléctrico de Audi, que entrará el año que viene, ya está en marcha en el Dakar otra aventura que tiene como destino el hidrógeno. Es la que encabeza el Cyril Despres, cinco veces ganador en motos, con un Peugeot 2008 DKR con el que están recopilando datos para poner en el desierto el primer motor de hidrógeno de la historia del Dakar en la edición de 2023.
Fuente: motorpasión.com (Por Roberto Rodriguez)