Fernando Alonso, doble campeón del mundo de Fórmula Uno y líder del Mundial de Resistencia (WEC), se ha mostrado satisfecho después de probar en Sudáfrica el Toyota Hilux, con el que el saudí Nasser Al-Attiyah ganó el último Dakar. «Ha sido divertido, diferente, sobre todo el entender cuanto puede aceptar el coche, que acepta una cantidad de maltrato importante porque vas sobre piedras, saltando, y responde a todo bien», ha comentado este miércoles el piloto asturiano tras su primera experiencia en el desierto de Kalahari.
El español, que ha contado con la ayuda de Giniel de Villiers y su copiloto habitual en Sudáfrica, Dennis Murphy, explicó que después de probar diferentes coches y en competiciones diferentes durante los dos últimos años, esta es «una oportunidad de probar algo muy diferente» a lo que está acostumbrado.
«Esta disciplina en el motor es una de las más complejas. Luchas contra cosas que están fuera de tu control. No estás en una zona cerrada como los circuitos, estás en un espacio abierto, todo puede pasar, te tienes que adaptar, estar centrado durante mucho tiempo porque las etapas son muy largas y bueno, el Dakar es la carrera más dura del mundo», ha asegurado.
Sobre sus sensaciones al volante del Toyota Hilux, ha explicado: «Esta posición de conducción es la más alta en la que he estado en un coche de carreras. Es una gran experiencia y estoy muy agradecido a Toyota. Para ellos es como una autopista, pero para mí es bastante duro, con varios saltos aquí y allá, con muchas rocas».
De Villiers ha agradecido la aportación de Alonso: «Estamos en el desierto de Kalahari y no es el lugar donde sueles ver a un campeón de F1 de manera normal. Es genial que haya venido Fernando aquí con nosotros a probar el Hilux. Es la mejor manera de probar algo tan diferente para él y tan novedoso. Es cuestión de que se acostumbre al terreno, a leer los saltos, las dunas, todo a lo que no está habituado», ha comentado el piloto sudafricano, ganador del Dakar 2009.
Fuente: El País